Checo Pérez sorprende al señalar buena relación con Helmut Marko: “Tiene dos personalidades”

Durante su paso por Red Bull Racing, una de las narrativas más persistentes en torno a Sergio “Checo” Pérez fue la supuesta mala relación con Helmut Marko, asesor deportivo de la escudería austriaca. Sin embargo, el piloto tapatío ha sorprendido recientemente al desmentir los rumores de fricción y revelar que mantiene una buena relación personal con el polémico directivo, a quien describió como alguien con «dos personalidades».

En una entrevista para el podcast Desde el Paddock, Checo fue enfático al separar la imagen pública que tiene Marko en los medios de comunicación, de la que él conoce en privado. “Helmut son dos personas: la de la prensa y la personal”, dijo, haciendo alusión a que el austriaco suele ser mucho más amigable fuera del micrófono.

Lo que más llamó la atención de las declaraciones de Pérez fue la afirmación de que Marko siente un profundo cariño por México, al punto de tener entre sus planes retirarse en el país. “Él ama México, va mucho a Tulum, le encanta. Se va a retirar en este país, no tengo duda de eso”, afirmó el piloto.

Este dato ha resultado revelador para muchos aficionados, considerando que Marko ha sido uno de los miembros de Red Bull que más ha criticado públicamente el desempeño de Checo, especialmente en comparación con su compañero de equipo, el neerlandés Max Verstappen.

A pesar de sus comentarios filosos ante la prensa, Pérez insistió en que en el ámbito personal Marko se comporta de manera muy distinta. Esta revelación pone en perspectiva la complejidad de la relación entre un piloto y la dirigencia de una escudería de élite, donde las presiones mediáticas y los resultados deportivos muchas veces distorsionan la realidad.

Helmut Marko ha sido un personaje controversial dentro de la Fórmula 1, conocido por su estilo directo y sus escasas concesiones al hablar. No solo ha sido duro con Pérez, sino también con otros pilotos del programa Red Bull, como Pierre Gasly, Daniil Kvyat y Alexander Albon.

Sin embargo, su influencia dentro del equipo es innegable. Fue mano derecha del fallecido Dietrich Mateschitz, fundador de Red Bull, y ha sido responsable de impulsar a talentos como Sebastian Vettel y Max Verstappen. Su rol va mucho más allá del asesoramiento: es un estratega, formador de pilotos y figura clave en el desarrollo deportivo de la marca.

En este contexto, las palabras de Checo sirven para humanizar a una figura frecuentemente vista como implacable, y matizan la percepción que el público tiene sobre su carácter. “Definitivamente eran dos versiones de él”, repitió Pérez, insistiendo en que la relación real distaba mucho de la imagen proyectada en entrevistas y ruedas de prensa.

Aunque Pérez ya no forma parte de Red Bull, las declaraciones recientes de Marko sobre él siguen apareciendo, lo que sugiere que el vínculo entre ambos no ha desaparecido del todo. Algunas de sus palabras incluso han sido interpretadas como indirectas o elogios disfrazados, lo que ha dado pie a nuevas interpretaciones sobre la verdadera dinámica entre ambos personajes.

En un deporte donde la diplomacia y la competencia coexisten, las declaraciones de Checo abren la puerta a entender cómo se construyen y reconstruyen las relaciones en la cima del automovilismo. A diferencia de lo que se podría esperar tras años de fricciones en público, la visión del mexicano pinta un escenario más equilibrado y personal, donde los intereses del equipo no siempre reflejan las emociones personales.

La confesión de Checo Pérez no solo sorprende, sino que cambia la narrativa en torno a una de las duplas más discutidas de los últimos años en la F1. Lejos de los focos, declaraciones y polémicas, lo que queda claro es que la Fórmula 1 también está hecha de relaciones humanas, muchas veces más complejas y contradictorias de lo que muestran los titulares.